El Bosque sagrado de Bomarzo, también conocido como Parque de los monstruos, es uno de los sitios más representativos de Tuscia, por su originalidad y por su singularidad.
De hecho, es un parque poblado por grandes esculturas de piedra volcánica, con animales mitológicos, una casa que se inclina, un teatro extraño, según un proyecto bastante inusual y aparentemente extraño, en comparación con los jardines a la italiana que surgieron en la misma época.
Quien quiso este parque fue Vicino Orsini, príncipe de Bomarzo y hombre de gran cultura, y durante muchos años se pensó que era una forma de rebelión contra las normas de la época y un proyecto dedicado a la memoria de su esposa, que murió antes que él .
Sin embargo, hoy hay nuevas hipótesis que han proporcionado una nueva clave de lectura interesante y relevante a este lugar, que con el tiempo ha fascinado a muchos artistas, entre los cuales el pintor e Salvador Dalí.
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El Bosque de Bomarzo puede ser combinado con una visita al cercano pueblo medieval de Vitorchiano, con Villa Lante de Bagnaia o Viterbo.
