Este impresionante santuario renacentista, se construyo a finales del siglo XV para celebrar una imagen de la Virgen pintada en una tecla a la cual se había atribuido milagros y alrededor de la cual se había desarrollado una devoción extraordinaria .
A medio camino entre Viterbo y el pueblo de Bagnaia, ofrece a los visitantes decoraciones en terracota vidriada por Andrea della Robbia, que rompen la fachada gris, un majestuoso techo de madera artesonado dorado, y un refinado templete en mármol realizado por Andrea Bregno , donde se conserva la tecla sagrada de la Virgen.
La visita del santuario se combina bien con la de Villa Lante de Bagnaia.