Muchos la llamam con razón “la perla de Tuscia”, ya que esta ciudad tiene mucho que ofrecer a aquellos que quieran descubrir esta tierra.
Sin duda alguna hay que empezar la visita desde las dos iglesias de San Pedro y Santa María la Mayor, obras maestras del románico que ahora ya no se utilizan para el culto, pero que se abren para que todos puedan beneficiarse de su belleza.
Pasaria después el centro de la pintoresca ciudad, rodeada de murallas con torrecillas y estrechas calles, fuentes y rincones para disfrutar de unas vistas impresionantes.
Pero no nos olvidemos de que los orígenes de Tuscania son etruscas y que la zona de los alrededores está llena de necrópolis, incluyendo de “Madonna dell’olivo” con la famosa tumba de la reina.
En el antiguo convento franciscano se encuentra en vez el Museo Arqueológico, con una interesante exposición de sarcófagos y ajuares encontrados en las tumbas de Tuscania.
¿Qué estás esperando, ponte en contacto conmigo y vamos a visitar Tuscania juntos!
La visita de Tuscania se puede combinar a la de Tarquinia y Viterbo.
